Hoy, 1 de enero, he comenzado a registrar en un documento de Google Docs la entrada y la primera sala de la mazmorra que se irá construyendo enmarcada en el reto #dungeon23, propuesto en la cuenta de Twitter de Sean McCoy (@seanmccoy), y cuyo hilo se puede seguir aquí.
En resumen, consiste en diseñar una mazmorra de 12 niveles, con 365 salas. Una cada día de 2023. E ir registrando el proceso en un diario.
Imagen tomada de la cuenta de Twitter de Sirio Sesenra (@SSesenra)
Lo primero que pensé es qué herramientas utilizar, dónde registrar cada entrada, etc. Aunque mi intención original era llevar un diario en papel, la he aparcado por el momento para ganar tiempo. A fin de cuentas no soy muy bueno dibujando mapas y existen un montón de opciones online para diseñar dungeons paso a paso, sala a sala, o para generar directamente un nivel completo.
En este enlace de ¡Cargad! hay muchas de estas herramientas para crear mapas de mazmorras.
Las utilidades para generar niveles completos también pueblan la mazmorra de tesoros, monstruos y trampas, pero siempre se puede prescindir de esa parte y quedarse con el mapa, para posteriormente ir detallando sala a sala según la idea que se tenga en mente.
Yo he optado por esta vía. Utilizar un generador de mazmorras como el Random Dungeon Generator o el One Page Dungeon para montar un nivel y, despojar ese mapa aleatorio de todo lo que lo puebla y volverlo a completar utilizando tablas de generación aleatoria como las que existen en manuales de juegos OSR como OSRIC o del Manual del Dungeon Master de la tercera o quinta edición de D&D.
De momento he empezado estoy usando el Apéndice A del Manual del Dungeon Master de D&D 5ª Ed. para generar resultados aleatorios en las tablas para poblar mazmorras. Iré utilizando tablas del Manual del Dungeon Master de D&D Ed. 3.5 y del OSRIC. Y por supuesto tengo pensado acudir en busca de inspiración y buenas ideas al megadungeon "La llamada de los dioses" y el libreto "Vestir el Dungeon" de La Marca del Este o a otro megadungeon clásico, "Dwimmermount", de James Maliszewski, cuyo desarrollo pudimos seguir en su blog, Grognardia y que se acabó publicando en una versión para ACKS por la editorial Autarch.
Como bien se indica en el citado Apéndice A del Manual del DM, "recurrir a tablas aleatorias puede dar lugar a resultados incongruentes. Por ejemplo, un templo ubicado en una habitación diminuta con un almacén enorme al lado. Encontrar una explicación para estas situaciones puede ser muy divertido, pero no temas hacer cambios si te parece oportuno. Siempre puedes tratar de forma especial algunas habitaciones clave y decidir tú mismo lo que contienen".
Por ello tengo decidido que a veces mandarán los dados y otras escogeré directamente un resultado de la tabla si éste ayuda a mantener cierta lógica interna en el dungeon. De igual modo, si es necesario, realizaré cambios en el mapa de nivel vacío que genere con cualquier generador aleatorio para añadir o quitar estancias, entradas, pasillos, puertas secretas o comunicación con niveles inferiores o superiores según me interese.
De momento no he definido ningún propósito de la mazmorra. Se irá definiendo y modificando conforme se vayan creando salas, objetos, peligros, encuentros y tesoros.
La prioridad es ir creando la mazmorra y poblando su interior. Conforme avance, si la VidaRealTM no me acaba apartando de este proyecto, quizá retoque salas ya pobladas si al crearse otras esto ayuda a dotar al complejo de cierta lógica. Para ello me apoyaré en los consejos sobre ecología de un dungeon que hay en los manuales que voy a usar como referencia, para tener en cuenta no las relaciones entre las distintas criaturas que habiten la mazmorra y su actitud para con los aventureros sino cómo se mueven por el complejo, dónde obtienen agua y comida aquellas criaturas que lo necesiten o cómo se libran de sus desechos.
No se si este proyecto acabará pronto, tarde o, de manera sorprendente, completaré el reto #dungeon23. Esperan 12 niveles y 365 salas. Una cada para día de 2023. ¡Adelante!
