Los Esoterroristas es un juego de rol diseñado por Robin D. Laws para Pelgrane Press donde los jugadores interpretan a investigadores de élite de la Ordo Veritatis, una organización secreta a nivel mundial que se enfrenta a las conspiraciones de los Esoterroristas, terroristas esotéricos integrados en diversas sectas y organizaciones que, cada una por sus propios y oscuros motivos, pretenden rasgar el tejido de la propia realidad y permitir la entrada a entidades de la Oscuridad Exterior, una dimensión pararela plagada de criaturas de pesadilla.
La edición en castellano corrió a cargo de Edge Entertainment. El manual es un delgado tomo en formato rústica de 88 páginas. La ilustración de portada es mi opinión muy sugerente, con una chica empuñando un arma en el umbral de una puerta. Viene del exterior y tiene la fuente de luz natural a su espalda pero está adentrándose en lo que se sugiere que es una estancia oscura y misteriosa con extraños los símbolos de corte ocultista pintados en la pared.
Los Esoterroristas fue el juego en el que se presentó el sistema GUMSHOE. La edición en tapa blanda y con pocas páginas parece que está en las antípodas de la tendencia general para los juegos de rol, generalmente editados en tapa dura y con un número respetable, cuando no enorme, de apretadas páginas (¡Hola Pathfinder!), pero lo cierto es que cumple con los objetivos marcados por el autor: presentar un sistema de juego sencillo, fácil de aprender en una hora y fácil de explicar en quince minutos.
La edición en castellano corrió a cargo de Edge Entertainment. El manual es un delgado tomo en formato rústica de 88 páginas. La ilustración de portada es mi opinión muy sugerente, con una chica empuñando un arma en el umbral de una puerta. Viene del exterior y tiene la fuente de luz natural a su espalda pero está adentrándose en lo que se sugiere que es una estancia oscura y misteriosa con extraños los símbolos de corte ocultista pintados en la pared.
Los Esoterroristas fue el juego en el que se presentó el sistema GUMSHOE. La edición en tapa blanda y con pocas páginas parece que está en las antípodas de la tendencia general para los juegos de rol, generalmente editados en tapa dura y con un número respetable, cuando no enorme, de apretadas páginas (¡Hola Pathfinder!), pero lo cierto es que cumple con los objetivos marcados por el autor: presentar un sistema de juego sencillo, fácil de aprender en una hora y fácil de explicar en quince minutos.